Los países que están apostando por la innovación están tratando de aumentar el interés de los y las estudiantes por la ciencia y la tecnología, ya que éstas disciplinas van a tener un impacto positivo sobre diversos ámbitos de la sociedad, como el medio ambiente, la salud y el desarrollo económico.

Para ello están introduciendo en sus agendas estrategias de Educación STEAM (Science, Technology, Engineering, Arts and Maths), que promueven, desde un punto de vista integral, una cultura de pensamiento científico e inspiran a estudiantes a desarrollar las competencias y habilidades para la resolución de problemas, aplicando el análisis y el pensamiento crítico que les permita participar activamente y contribuir al desarrollo de la sociedad y mejorar la calidad de vida de las personas.

Estos países líderes en innovación han convertido la Educación STEAM en una prioridad debido a 2 factores principales:

  1. La necesidad y urgencia de fomentar una cultura innovadora en toda la sociedad y a todos los niveles empezando por los niños y niñas. La Educación STEAM permite que el alumnado desarrolle habilidades y competencias relacionadas con la innovación, independientemente de que se vayan a dedicar o no a una profesión científico-técnica.
  2. El aumento de la demanda de profesionales cualificados en STEM, cuya tendencia se prevé vaya a continuar. Sin embargo, a la baja natalidad de países como el nuestro, hay que sumarle el hecho de que el número de estudiantes que optan por una formación científico-tecnológica no aumenta al mismo ritmo que la demanda.

A su vez, los colegios que están apostando por la innovación han convertido el modelo de Educación STEAM en una prioridad. Es importante trabajar sobre las competencias relacionadas con la innovación y fomentar una cultura innovadora entre niñas y niños, y para ello se están apoyando en programas didácticos como la  FIRST LEGO League Euskadi. Así, algunas de las escuelas que participan en FLL Euskadi están viviendo cambios significativos hacia este objetivo:

–          Incluyen metodologías innovadoras como el aprendizaje basado en proyectos a través de retos de la vida real

–          Potencian las habilidades tecnológicas entre el alumnado

–          Se acercan al mundo profesional vinculado a la ciencia y la tecnología

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